Ciudad Bolívar, 17.04.67 (Esp.)
"A vuelta de diez o quince años, en esta ciudad no quedará ni un solo
palmo de terreno que no esté ocupado por alguien, amparado por un derecho legal
o ilegal", dijo hoy alertando a los concejales el ingeniero municipal,
Luis Eduardo Arreaza.
El Municipio Ciudad Bolívar viene confrontando un problema grave con sus
ejidos, basado en el hecho de que los mismos se agotan rápidamente. Se venden, arriendan,
invaden y se regalan grandes cantidades de tierras. El ingeniero municipal en
su informe elaborado para la Cámara Edilicia, deja entrever la responsabilidad
del departamento de fiscalización de ejidos que, al parecer, y según las
quejas que a diario recibe la ingeniería, no cumple con los trámites legales en el
otorgamiento de tierras ni ejerce "una verdadera fiscalización de los
terrenos arrendados o en enfiteusis", los cuales no se utilizan con el fin
propuesto en las peticiones respectivas.
Asimismo, asienta el ingeniero, los fiscales "dejan invadir grandes
zonas, con consentimiento o sin él, permitiendo la proliferación de
construcciones sin permiso y en forma ilegal desde todo punto de vista".
La consecuencia de esto —añade— es el crecimiento desordenado de la
ciudad, lo cual incide en el alto costo de ejecu‑
ción y mantenimiento en los servicios
mínimos dentro de la
comunidad.
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